Fin etapa argentina, llegan las CATARATAS DE IGUAZÚ!

Mañana del martes 20 de abril, tomamos el autocar junto con Naor (Israel) y Casey (Australia) y camino de Salta. En la ruta, llegamos a los 5200m de altura, subimos y descendemos por un paisaje increíble, que pequeños somos. Llegamos a Salta donde esperamos ver de nuevo a Natasha (ver entrada del blog de Calafate y Chaltén, sur de Argentina). Coincide que está aquí y se hospeda en un hostel distinto.
Nuestro hostel es bastante correcto y además incluía el taxi gratis desde la terminal de bus. Nos ponemos cómodos, duchita y salimos a comer algo, reencuento magnífico con Natasha, nos contamos las experiencias vividas por cada uno (ella fue por Mendoza, Bariloche, hacia el norte y ahora se va para Bolivia, quizás nos volvamos a ver en Perú antes que ella acabe su viaje de vuelta a UK).
Hoy miércoles hemos vuelto a quedar con Natasha por la mañana, y junto con Naor y Casey (Jose se quedó de relax en el hostel) hemos visitado un mercado artesanal algo apartado del centro de Salta, y después hemos decidido no visitar el museo antropológico de la ciudad ubicado en pleno centro en la plaza 9 de julio porque teníamos que pagar 30 pesos por la entrada y el interés tampoco era para pagar esto. Lo mismo hemos decidido con el museo arqueológico por lejano pero también falta de tiempo.
Nos sentamos en una terraza de la plaza para comer algo (pizza grande 4 quesos más jugo de limonada a compartir) y después nos volvemos a despedir hasta la próxima. Tomamos el autocar de las 15h dirección Iguazú, también toca despedirnos de Naor y Casey, él se va para Córdoba y ella para Buenos Aires.
Aquí finalizo mi relato por esta vez, en pleno viaje de 22h hasta Puerto Iguazú, con un clima más húmedo, con un conductor al que le gusta pisar y con una mierda serial suramericano que el poco simpático señor nos ha puesto en el bus. Llevo como 8-9 días que no hago limpio con mi catarro (todavía tengo tos y mucosidad), espero que para las cataratas este bien recuperado.
Con rotura de luna frontal del ómnibus incluida a causa de la fuerte tormenta sufrida y que nos obligó a cambiar de bus a las 4.30am llegamos a Puerto Iguazú, donde, cómo no, llueve. Un sitio selvático, con mucha humedad y donde el verde predomina sobre todos los colores.
Nuestro hostel de HI se encuentra en la ruta que lleva a las cataratas y el bus tiene parada en él. Estamos en un shared dorm para variar, en plan económico, y pagamos 42 pesos por noche (está bien). El hostel tiene piscina bastante grande, mesa de billar, ping-pong, bar en la piscina, terraza… No está mal, no. Parece que estemos de vacaciones, no?
Llegamos cansados y este primer día nos lo tomamos con mucha pachorra, hasta la mañana del día siguiente no iremos a las cataratas, el lado argentino. Pasamos parte de la velada nocturna charlando con la gente en el mismo hostel, a la par que haciendo un par de partidas a ping-pong con José, hay pique, hay pique, hehe!
En fin, día 23 (resulta que es Sant Jordi en Catalunya, ostras, ni me acordaba…! Si es que estoy muuuuy desconectado) y a las 8.30am nos vamos para las cataratas en bus. Y por fin llegamos!! Sale 85 pesos la entrada. Iniciamos la visita con Jose con muchas ganas y emoción contenida. Del lado argentino hay como tres cosas muy claras por hacer. Coger un tren desde la estación central hasta la estación cataratas y allí hay dos senderos de pasarelas, el upper y el lower, uno por encima de las mismas y otros por debajo, fácil, no?
Empezamos por el upper. Impresionante, las vemos por primera vez y te da por casi llorar. Hay muchas y con bastante agua. Las caídas de agua te quitan el hipo. Fotos fotos!!! Ya en el lower, vamos a hacer lo que queremos, es decir, coger un bote de 64 plazas (somos sólo 8) y dirigirnos hasta las mismas entrañas de las cataratas a mojarnos. La polla! Perdón.
El Parque en sí parece como estar en medio de la selva si no fuera por los caminos, las indicaciones, las pasarelas, escaleras, baños, jaja etc. Clima muy húmedo, y lloviendo de vez en cuando.
A la tarde, antes de finalizar, vamos a la última parte de la visita que por cierto la hacemos junto a una chica holandesa, un chico alemán y otra chica israelí, conocí a la holandesa (Meike) en la terminal de bus al llegar y casualmente nos hemos visto aquí esperando el tren que nos lleva a la Garganta del Diablo. En fin, llegamos y la verdad que todavía impresiona más que lo anterior, es una bestialidad de grande, la cantidad de agua, que bonito! No tengo palabras… se puede escribir pero lo que se siente allá, me lo quedo para mí.
Volviendo con el trenecito a la entrada del parque vemos por casualidad también a Koen y Lot, dos belgas que conocimos en Cafayate y que viajan en bici, que grande! Total, que a la noche y dado que nuestro hostel parece ser el del ambiente del lugar, los belgas que los otros tres amigos nos encontramos todos y la verdad que la pasamos genial, tomando y charlando, hasta las tantas.
Segundo día en cataratas y pasamos del lado brasileño, se dice que el argentino es el mejor y la verdad hay previsión de sol un poco y queremos más del lado argentino. Con un cansancio del copón, con sueño, nos volvemos, segundo día, 45 pesos, para volver a entrar al mismo lugar…
A la noche se ve que ha llovido muchísimo, tanto es así que la Garganta del Diablo está cerrada y sólo podemos ver los caminos upper y lower. Las cascadas están mucho más cargadas de agua que el día anterior, y la verdad que es acojonante.
En fin, extenuados por la emoción de los dos días en Puerto Iguazú (geniales) y cansados por la falta de sueño, nos vamos hacia las 15h a la terminal de bus del pueblo y sin haber reservado antes pillamos los primeros pasajes que podemos para ir a Buenos Aires de vuelta, ya que tenemos el vuelo a Sao Paulo el día 26 por la mañana y llegaremos en 19h a Capital Federal.
Viaje largo pero como es nocturno dormimos como campeones, vemos alguna película con suspense en el bus porque se encallaba un montón, acabamos otra peli por el portátil que teníamos a medias y entre una cosa y otra, nos plantamos Bs As, en la estación de Retiro, y tomamos el Subte para San Telmo, volvemos al mismo hostel Inn del primer día cuando llegamos a Argentina. Y aquí estamos, de relax, esta noche volvemos a coincidir con Koen y Lot que también se han venido a descansar unos días aquí y estan a cuatro cuadras en otro hostel de San Telmo. La pasaremos bien, nos reiremos y mañana temprano bus para el aeropuerto, fin de la primera etapa del viaje, Argentina, e inicio de la segunda, BRASIL!!

SALAR DE UYUNI, bienvenidos a BOLIVIA…

Total, que cruzamos la frontera entre Argentina y Bolivia a pie, y nos dirigimos a la estación de tren de Villazón, a pleno sol. El cambio sólo entrar en Bolivia se hace evidente. La calle principal del pueblo llena hasta los topes de tiendas, casas de cambio, puestecitos en plena calle, gente arriba y abajo cargada con sus bultos, gente más bajita y con la piel más oscura (ya en el norte de Argentina se nota que la población es más indígena).
Al llegar a la estación se podría decir “Bienvenidos a Bolivia”. Una estación pequeña, de hecho nos la pasamos de largo y tuvimos que preguntar, con alguna gente del lugar y el resto mochileros del mundo esperando su turno sentados en la curiosa sala de espera. Como atención al usuario, un señor en una taquilla vendiendo los pasajes y un policía.
El policía, que no era mister simpatía, nos comunica que para Uyuni está full, son las 11.30h y el tren sale a las 15.30h. Ya empezamos… le insistimos que no queremos esperar dos días más hasta el sábado (siguiente tren a Uyuni) y nos propone, en un aparte, tener dos pasajes haciendo una llamada pagando 90 bolivianos en vez de 48 (bajo mano). En fin, que aceptamos y viendo lo que pasó a posteriori la cagamos. Hubo más gente que hizo lo mismo pero también hubo más gente que llegó más tarde y que pagó el precio normal, que le vamos a hacer, mejor pagar la novatada de inicio e ir preparados (ojala todo sea estos 4 euros al cambio que pagamos de más).
Nos llevamos la alegría que nos encontramos con nuestras amigas españolas Lidia y Vero que también se dirigen a Uyuni, aunque para el viaje iban en otro coche del tren.
El viaje dura desde las 15.30 hasta la 1.30am que llegamos a Uyuni. Llegamos a pasar los 4000m de altura durante el trayecto (un tren muy lento y no era el AVE vamos) y hubo algun pasajero que se puso mal por esta razón. Comimos un poco de arena durante el viaje que se colaba por las ranuras de las ventanas y el respirar a veces era un poco dificultoso. Eso si, nos pasaron unas cuantas películas y algún DVD de éxitos musicales de dudosa categoría.
Al llegar a Uyuni, varias personas te vienen ofreciendo hostel y como no teníamos reservado nada, junto con las chicas aceptamos una de las opciones y a la cama directos, no os esperéis camas confortables, pero el cuerpo agradece el descanso de toda manera.
A la mañana me tomo una ducha con agua caliente, me acompañan a la ducha, me abren la puertecita, encienden el agua caliente y esperando para pasar y quitarme la ropa para ducharme tengo un señor detrás que me mete prisa por el agua caliente cuando aún ni tan siquiera estoy listo para empezar… en fin, sólo es anecdotario.
Las amigas españolas sólo iban a hacer un tour de un día por el Salar, nosotros en cambio vamos a mirar de hacerlo de 3 días llegando a San Pedro de Atacama en Chile para ir luego de vuelta a Salta en Argentina, previo a tomar otro bus hacia Iguazú.
Es imposible empezar el tour a la misma mañana, éstos salen entre las 10.30 y las 11 y lo que hacemos es reservarlo con una de las tantas agencias disponibles para el día siguiente. Pagamos 600 bolivianos por el tour, incluye el transfer desde la frontera con Chile hasta el pueblo de San Pedro. Pasamos el día tranquilos, aprovechamos para llevar ropa sucia a lavar para que esté lista a la tarde. A la noche, nos vamos a cenar con las chicas y sorpresivamente éstas se presentan con una chica boliviana de las que te venden los tours con la que compartimos una muy agradable cena en un lugar local que ella nos lleva (encantador y auténtico). Nos parece de recibo y la invitamos entre todos.
Luego antes de irnos a la cama vamos a tomar algo los cuatro (la chica boliviana tenía que ir a la estación de buses a trabajar ya que llegaba un bus al pueblo) en un lugar también curioso, el Extremo Fun Pub, donde vemos que tienen muchos papeles por las paredes por una competición que iniciaron hace unos dos años donde ofrecen 8 chupitos y dos copas de unas bebidas heavies, el record en 36 segundos, eso si, como recomendación hay que ir al baño a vomitar al hacerlo porque si no a los diez minutos estás jodido, y no me extraña una de las bebidas por ejemplo tenía una graduación de 96 grados. Que locos por dios!!!! Ajajá
Día 17 de abril, desayunamos en un sitio donde sirven unos buenos desayunos con Lidia y Vero. Después, alrededor de las 11h cada uno sigue su camino con su tour contratado, despedida tristona, son muy majas y nos lo pasamos muy bien juntos. Nos encontraríamos más tarde en la Isla del Pescado dentro del Salar.
Y empieza el tour!!! Somos un grupo de 6 (como todos) con un Toyota Land Cruiser 4x4 absolutamente imprescindible como descubriríamos. Los seis somos una chica de Australia, Michelle, un chico muy cachondo de Polonia, Sebastian, una pareja brasileiro, Tiago y Ana, José, yo y el guía, nuestro conductor, Gabino (un tipo curioso).
Primero, visita relámpago, después de arreglar uno de los neumáticos, al cementerio de trenes situado cerca de Uyuni, un lugar sombrío en medio de la nada, calorazo y trenes que parece que tengan 200 años pero que sólo hacía 25 que funcionaban.
Después, visitamos un pueblecito donde nos explican el proceso de transformación de la sal una vez ésta se recoge del Salar para su venta, añadiendo una muy pequeña cantidad de iodo para evitar la enfermedad del bocio. En el pueblo comemos en un lugar donde las paredes, la mesa y los bancos donde comemos están hechos de sal, antes de partir nos ofrecen comprar algo de artesanía en algunas puestos que están en la calle (si se le puede llamar calle). Seguimos.
Y entramos en el Salar, impresionante!! Todo un desierto blanco enfrente, a los lados, infinito. Recorremos maravillados los primeros kilómetros y nos paramos para ver un antiguo hotel ahora museo de sal. La siguiente parada es en la Isla del Pescado, donde ascendemos (como cansa subir a 3700m de altura, hay que regular los esfuerzos) para llegar a una especie de mirador y disfrutar de la increíble visión del Salar. Finalmente, nos dirigimos para acabar el día al borde del Salar donde pasaremos la noche en un “hostel” y veremos la puesta de sol así como el amanecer si nos levantamos a las 6. Nos hacemos antes de llegar al hostel las típicas fotos artísticas divertidas en el Salar y después de una puesta de sol maravillosa, cenamos y tras un buen rato de charla y de cartas nos vamos el grup de seis a un dormitorio compartido a dormir en camas que tienen colchón con forma de V, directamente duermo en diagonal, que si no, ufff, ni puedo.
Amanecer del segundo día de tour, 18 de abril, vemos un delicioso amanecer desde el borde del Salar, que sensación más agradable debo decir, recién despierto y ver esto. Iniciamos el día como no subidos en el 4x4 haciendo kilómetros yendo para un lugar con bellas vistas y tomar algunas fotos. Después ocurre el “Suceso”. Nos dirigíamos hacia la Laguna Colorada cuando un grupo de gente, algunos encapuchados otros no, bloquea la carretera con piedras y obliga a una caravana de 20 4x4 llenos de turistas (más de 100) incluido el nuestro a parar. No sabemos inicialmente que está pasando. Salimos de los carros, aparentemente tranquilidad. Resulta que se trata de la gente de un pueblo cercano que tiene falta de agua, electricidad desde hace días y como protesta decide retenernos. Nos obligan a dar marcha atrás y con gente subida en cada uno de los 4x4 volvemos sobre nuestros pasos unos 40’ hasta su pueblo donde al llegar el pueblo entero nos espera y nos recibe entre aplausos como victoriosos. Allá somos bloqueados por 3h, y nos obligan a escuchar su denuncia, algunas personas con pancartas y con micrófono exponen su situación y dan las gracias a los turistas por añadirse en apoyo a su causa (bueno, está bien, pero digamos que nos hemos visto obligados a hacerlo). Un francés un poco freakie también dice unas palabras en apoyo y piden que enviemos algunos correos a embajadas para dar fuerza y repercusión a su causa. Aprovechamos y comemos allá, es mediodía, y como decía tras 3h de espera nos dejan continuar con nuestro tour gracias a un salvoconducto con todos nuestros nombres y estampando un sello que nos permitiría continuar en caso de volver a ser bloqueados.
En fin, con todo esto, nos esperaba un camino largo hasta Laguna Colorada, concretamente desde las 15.30h que salimos nuevamente hasta las 21.30h que es cuando llegamos después de ir por terrenos muy variados, subir, bajar, ver flamencos en varias Lagunas, ya de noche el árbol de piedra… y con la tontería entramos en el parque nacional donde está el lago (pagando religiosamente los 30 bolivianos estipulados) ya siendo oscuro por lo que tendré que verlo por internet en fotos. Cena, sin posibilidad de ducha y a dormir que al día siguiente (último del tour) nos levantamos a las 4h para ir dirección los geisers. Esto hace que como contaba no pudimos ver Laguna Colorada, mierda!
Salida de madrugada, ya naciendo un nuevo día, llegamos a los geisers, espectacular! Olor a azufre brutal, muy muy bonito de ver, de verdad. Rodeados además del paisaje tremendo y de unos colores gracias al amanecer geniales.  Seguidamente llegamos a las hot springs (aguas termales) donde desayunamos y nos damos un baño con un agua a unos 35 grados y con frío en el exterior (estamos a 4600m de altura). La experiencia es realmente maravillosa, nos sentimos como nuevos tras el baño y de buen humor.
Finalmente, vamos hacía Laguna Blanca, Laguna Verde que es donde está la frontera con Chile y donde Jose, Sebastian y yo nos despedimos del grupo que volverá a Uyuni y tomamos un minibús como transfer para cruzar la frontera y plantarnos en 45’ en San Pedro de Atacama tras descender unos 2000m hasta los 2600m.
Bienvenidos a Chile!! Viniendo de Bolivia, se ha notado la diferencia, carretera asfaltada, con señales, incluso carriles de parada de emergencia en el descenso. Al llegar a la aduana de San Pedro y sellar la entrada en Chile, vemos que hay un autocar que va hacia Salta (Argentina) que es donde pretendemos ir tanto pronto como sea posible. Somos 4 los interesados en tomar inmediatamente el bus y hacer el viaje de 10h, hay 6 asientos disponibles pero el policía de la aduana no nos deja coger el bus por la patilla. En fin, mala suerte, compramos pasajes para el día siguiente que sale uno a las 10h de la mañana del día 20.
Por lo que nos instalamos again en un hostel de la cadena de HI con descuento (6000 pesos chilenos) y decidimos relajarnos un poquito por la tarde. Lo Acabamos pasando realmente bien, conocimos a un chico de Israel, una chica australiana, dos chicas chilenas, y junto con otro francés y tres japos, pasando la velada tomando unas cervezas y jugando a las cartas a un juego que propone el compañero israelí. Se hace tarde, nos llaman la atención por el ruido a partir de las 00:00h y decido ir a la camita, habitación compartida con dos suizos, estamos en el piso segundo de una litera de TRES pisos!!!! Peligroso para el de arriba en cado de caída, my God!

Continuación Norte de Argentina...

Llegada a Tafi del Valle alrededor del mediodía. Acá lo que hacemos es dejar los bultos (véase mochilas) en un hostel en consigna (mejor que en la terminal…) y nos disponemos a hacer una visita express por los alrededores del pueblo, que está enclavado en un valle inmenso el cual tiene un microclima respecto del otro lado de las montañas de donde veníamos que por la humedad parecía zona selvática. Aquí, en cambio, estamos en una zona mucho más árida y con un calor de aupa. Estamos a unos 2000m de altura s.n.m.

Decidimos hacer una excursión a pie de unas 3h caminando hasta el pueblo de El Mollar bordeando el río Tafi, el cual apenas lleva agua. De camino, destacar que nunca había visto tantos saltamontes y que nos cruzamos con una manada de unos 25  caballos al galope que no veas, bonita estampa. En el valle, sol, cuando miras hacia las montañas las nubes tapan sus cumbres.

En El Mollar visitamos la reserva de Menhires, nada del otro mundo, 3pesos más pa la saca. Volvemos a Tafi en colectivo ya que sino no llegamos a tiempo de tomar el colectivo que nos llevará a Amaicha del Valle para hacer noche.

El trayecto es de unas 3h y pico, con 30’ de retraso, con un conductor loco, llegamos a los 3200m de altura para inmediatamente descender a los 2000m de Amaicha. El autobús del infierno, ya que era oscuro, con lucecitas rojas y un conductor endiablado, el cabrón. A la llegada a Amaicha, 22.30h, teóricamente  nos esperaba alguien para llevarnos al hostel, el tio se había dado el piro, tuvimos que parar a una señora con un jeep 4x4 quien muy amablemente nos hizo el favor de llevarnos subidos en la parte de atrás (al aire libre) hasta el hostel. Llegamos, y a la mesa, parecía que nos esperaban, parecía una secta, no nos enseñaron ni la habitación, nos dieron, eso sí, de cena un par de croquetas caseras, un poco de pasta y bebida. Un rato de charleta con los presentes y por mi parte, a la cama.

Al día siguiente habíamos apalabrado una excursión con guía a las ruinas de Quilmes, que estaban a unos pocos Km de Amaicha. La cual compartimos con una chica, su madre y su abuela de Mar del Plata. Y como una familia, tuvimos el placer de compartir unas horas con un chico indígena (músico y creador de sus propios instrumentos) que nos hizo de guía. En las ruinas había muchísimos cardones (cactus), algunos de hasta 5m de altura, y algunas llamas. Subimos hasta un mirador donde pudimos apreciar la belleza del paisaje de todo el valle, las ruinas y el enmurallado que las rodeaba.

A la tarde, en la ruta, paraba un colectivo que nos llevaría hasta Cafayate en unos 40’. Allá, teníamos hostel reservado. A la llegada, sábado y en España las 22h, ¿Qué pasaba? EL CLÁSICO!!! Como no, nos metimos (antes de ir al hostel y todo) en un bar-restauran y a disfrutar del partidazo del Barça, 0-2 y la Liga al saco. Visca el Barça!!!

Me gustó Cafayate, me dio buenas vibraciones. Pueblo pequeño, con una plaza principal donde había buena parte de la vida del pueblo y en las calles inmediatas, más bien casitas y tranquilidad. En el pueblo había bastantes bodegas de vino, ya que en la zona se hace buen vino.

En el trayecto, maldición, nos dimos cuenta que me había dejado mi abrigo en el hostel de Amaicha, y dentro del mismo mi disco duro, ahhhhhh! Llamé y por suerte había unos que venían al día siguiente a Cafayate y me lo traían, que bien! En cambio, Jose se dejó el mobil y éste no fue encontrado, tuvo que bloquear la línea.

En el hostel, buen rollito y mucha tranquilidad, yo al menos lo agradecí. Conocimos a dos belgas, chico y chica, que viajaban en bici hacía unos 6 meses y que fueron muy buena compañía allá. Juntos, y con una chica italiana que también conocimos, nos fuimos de bodegas para hacer degustaciones de los vinos, que buena onda!

Hicimos dos noches en Cafayate, una de las cuales cenamos fuera por 30pesos cabeza en un sitio muy auténtico con música local en vivo, aperitivo, segundo (cazuelita de cabrito, guiso riquísimo) y postre. Luego cerveza Salta en un bar superlindo con una pareja, que también conocimos en el hostel, de Mar del Plata.

Next destinación… Salta. A unas 3h de distancia, y con otro conductor loco, eso sí, pudimos disfrutar de las vistas con la quebrada de las Conchas y la Garganta del diablo.
Llegados a Salta, y a sólo unas pocas cuadras nos espera el hostel. Tenemos la expectativa de vernos en el hostel con Rahul, el chico indio-norteamericano con el que coincidimos en el sur en Chaltén y que me comentó en un mail que llegaba a Salta el mismo día que nosotros, le dejé un mensaje diciéndole en que hostel estaríamos.

El hostel, normalito, eso si, bastante bien ubicado (32pesos desayuno incluido). Son las 18h y aun no hemos comido!!!! Nos vamos al centro, muy bonito, con edificios bonitos por momentos (en Salta se ve que hay más plata), un par de calles de shopping peatonales. Comemos en la Plaza 9 de Julio (centrazo) unas pizzas. Con la barriga llena, damos una vueltecita y disfrutamos de la civilización nuevamente. De vuelta al hostel y casualmente nos encontramos con la pareja de Mar del Plata que habíamos conocido en Cafayate, Damián y Julia. Quedamos con ellos para la noche ir juntos a tomar algo.

En Salta estamos a 2200m y no sé si vinculado a esto o por otros motivos no me siento bien, tengo dolor de cabeza y mucosidad creciente, a la par que un dolorcito en el interior de la boca y otro más en la parte superior de la espalda (mochila?). Con todos estos ingredientes y por vez primera me tomo un ibuprofeno. Decido quedarme descansando en el hostel muy a mi pesar, a las 21.30h ya estoy en la cama.

Al día siguiente, 12 de abril, y después de unas 10h de descanso, me siento nuevo, fuerte, sin dolor de cabeza, de boca ni de espalda, desayuno y a hacer la mochila que toca check-out. Nos guardan la mochila en el hostel y nos vamos a tomar el teleférico de Salta que nos lleva hasta la cima del Cerro San Bernardo (2500m de altura) donde después de 8’ de subida disfrutamos de unas bellas vistas y una bonita cascada (artificial). Y mira por donde, paseando nos encontramos a Rahul con un par de amigos más que está en Salta. No vió mi mensaje en el Facebook y por eso no sabía donde estábamos. Nos alegramos de vernos, pero toca despedida, nos tenemos que ir a las 13h hacía Jujuy.

Colectivo de una hora y media más o menos y llegados a Jujuy toca de nuevo comprar boleto para las 15.30h salida hacia Purmamarca, En el ínterin comemos milanesas y lomito mientras esperamos la salida. Otra hora y pico. A las 17h llegamos a Purmamarca y cogemos un hostel normalito (30pesos dormitorio compartido - no hay nadie- sin desayuno y sin internet).

Nos ponemos cómodos y nos vamos a pasear por un sendero con un recorrido de 1h y con unas vistas cerros y montañas de multicolor, amazing!, y raro de cojones.

De nuevo en el pueblo, toca duchita con agua caliente (sólo de 19 a 22h) y cena frugal.Al dia siguiente, nos vamos a visitar el pueblo de Tilcara, ubicado a unos 40' de Purmamarca hacia el norte. Decidimos ir a ver el Pukará, un cumbrecita a 20' caminando desde el pueblo donde hay unas buenas vistas de la quebrada y ruinas de los antiguos indígenas que allí vivian. Después, decidimos contratar una excursión a unas cuevas de una duración de 3 horas y media. Bellos paisajes de la Quebrada, nos metimos en una cueva con velas por unos 35m hacia dentro, y luego un descenso "majo" hacia el pueblo de nuevo. Llegué bastante cansado a Purmamarca por la noche... nos metimos una cena de puchero, locro.
Al final de la excursión de Tilcara, nos encontramos casualmente con dos chicas españolas, que habíamos conocido en el hostel de Tucuman, y que se van para Uyuni en tren desde Villazon (Bolivia) el jueves 15 de abril, es decir, mañana. Nosotros ibamos a ir el sabado en tren hacia Uyuni también, pero por un tema de fechas y pensandolo mejor decidimos intentar llegar a frontera con Bolivia a la mañana siguiente desde Purmamarca y tomar el mismo tren y asi coincidir también.

En fin, salió bien, salimos por la mañana temprano a las 7h de Purmamarca dirección La Quiaca pueblo argentino fronterizo con Bolivia y al llegar allá cruzamos la frontera caminando, pasando el control de migración. Estamos en Bolivia y a 3700m de altitud!!!!! Lo del tren de Villazón a Uyuni tiene su historia y será en la proxima entrada. Besos a todos, por ahora no puedo colgar fotos en esta entrada lo hago a la que pueda.

Inicio etapa Norte de Argentina. Córdoba y Tucumán

El trayecto de 10h desde Buenos Aires a Córdoba me lo paso literalmente durmiendo como un campeón, que bien! El descanso no es el mismo que si duermes en una cama pero reconforta.
Día 4 de abril, nos quedamos en el segundo hostel que visitamos, el Palenque,(35$ la noche hab compartida de 8) y fue una gran decisión!! Muy buena onda. Nada más llegar nos ponemos a hablar que si con unos que si con otros, conocemos a una pareja muy maja española (Clara y Borja, de Madrid y Bilbao) con la que compartiríamos muy buenos momentos. Jose decide preparar una paella para 6 y comemos fantástico junto con la pareja, y una de las chicas del hostel y su hija. Cocinero cocinerooooo!! Que suerte la mía de tener al cocinitas.
Hacia la tarde-noche nos vamos a una feria de paraditas de artesanía con Clara y Borja, donde lo pasamos muy bien, disfrutamos de un mini concierto en la calle de un grupo de percusión de ritmos africanos, y nosotros baila que baila. De vuelta, nos paramos en un local con música en vivo, y la que se lía, menudo quilombo! Una Quilmes por aquí, música muy buena de cantautor con su guitarrita (remember Madrid) por allá. Total, nos hacemos colegas de los que cantan y los del local y nos vamos a seguir la fiesta a casa de uno de los músicos, seríamos unos 11-12, hasta las tantas, una gente muy maja (Nico, Agus, etc.).
Al día siguiente cualquier intento de excursión es en vano, nos quedamos todo el día en el hostel de relax, que también está bien. El día 6 sí que nos vamos de excursión al pueblo de Alta Gracia, a unos 40’, allá está la casa museo del Che Guevara, donde vivió con su familia de 1932 a 1943 en su infancia tratando de que éste mejorara de su problema con el asma al ser una zona del país con un clima más seco. Más tarde se convertiría junto con Fidel y demás en parte importante de la Revolución en Cuba, ocupando cargos importantes dentro del Gobierno y viajando por todo el mundo. Después se fue a África y finalmente murió abatido en 1967 en tierras bolivianas y su cadáver no fue encontrado hasta 30 años después en una fosa común.
A la noche, de vuelta al hostel, cena con empanadas gratis que prepara la gente del hostel y con música y un poco de vinito se nos dieron las 3 y a dormir.
El día 7 de abril es el día que hacemos el check out, dejamos las mochilas en el hostel y nos vamos con Clara de excursión al pueblecito de La Cumbrecita, a unas 3h de camino sumando los dos buses que tuvimos que coger, uno desde Córdoba y otro desde Villa General Belgrano.
En La Cumbrecita pasamos el día caminando y viendo un lago de truchas (nada destacable), la Olla (una caída de agua que hace como de piscina natural donde en verano bañarse debe ser un goce) y finalmente la cascada Grande, muy bonita, allá comimos unos sándwiches y de vuelta al bus a las 16h. El pueblo en si estilo alemán, casitas de madera, cuco pero tampoco nada especial. El paisaje eso si, bello. Estamos a unos 1400m de altura.
A la noche, con Jose, cenamos un asado en un restauran recomendado por los del hostel, delicioso!! Y con la barriga llena nos vamos a la terminal y ómnibus nocturno de 8h hasta San Miguel de Tucumán.
Nos alojamos por una noche en un hostel más tranquilito que el de Cordoba (35$ again), menos gente. Conocemos 3 chicas francesas de Lille y me voy con ellas de paseo al centro, Jose estaba muy cansado del viaje porque no durmió y se queda sobando.
Visitamos el centro de la ciudad, probamos las famosas empanadas de Tucumán (muy buenas) en un puestecito donde un señor con abuelo de Vigo me regala un imán con forma de empanada para poner en la nevera (J), la Casa de Gobierno y la Casa Histórica, donde se firmó la declaración de independencia en Argentina en 9 de julio de 1816, después de 6 años de batallas, con los americanos del virreinato que luchaban bajo mandato del Rey español, algunas de ellas claves en Tucumán mismo y en Salta.  De vuelta al hostel, milanesa para comer, la compro en una tienda de comida para llevar donde un señor me tiene un rato hablando de Messi, de la Argentina y sus problemas económicos.
Siesta time de 2,5h y a la noche, cenamos pasta junto con las amigas francesas en el hostel, con un delicioso postre, alfajor con dulce de leche (rico rico). A la noche nos la pasamos hablando con un grupo de chicos argentinos de Mar del Plata. Y después con dos españolas que están viajando por 3 meses por America Latina y que viven en Irlanda, muy simpáticas.
Mañana del 9 de abril, aquí estoy, sentado en otro bus de los coj…es, jeje ahora 2,5h hasta Tafi del Valle, donde esperamos visitar el pueblo y después hacer noche en Amaicha para ver las ruinas de Quilmes, antes de seguir hacia el norte a Cafayate y Salta.
Las sensaciones personalmente siguen siendo buenas por ahora, todo bastante fácil, sin ningún problema destacable. En cada lugar, conoces y te cruzas con gente con distintas rutas y tiempos pero con un denominador común, viajeros a los que les gusta descubrir mundo y buenrollismo. Con los argentinos que nos hemos ido cruzando por el camino siempre ha habido muy buenas vibraciones, son recopados. Aún no tengo la sensación de estar realizando un viaje de un año alrededor del mundo, supongo que cuando nos vayamos para Bolivia o Brasil la cosa cambiará. Hasta la próxima. 

Ushuaia - Provincia de la Tierra de Fuego, ciudad del fin del mundo

Y llegamos a Ushuaia a las 21.30 más o menos del 1 de abril.
No sin antes contar que en el ómnibus durante el trayecto hemos conocido a una chica catalana, Joana, una francesa, Virginie, y un grupo de 3 argentinos (Julio, Chueco y Pato) con los cuales hemos disfrutado de un viaje de lo más divertido.  Como siempre, un viaje largo y pesado, además pasamos 2h esperando en el puesto fronterizo con Chile a pasar la frontera y recibir el sello en el pasaporte. También cruzamos el estrecho de Magallanes en ferry.
Bien, llegamos al hostel de Ushuaia (Los Cormoranes de HI, 50$), donde la ciudad nos recibe con lluvia, pasamos una noche tranquila, cenamos en el hostel y tomamos un par de quilmes en el bar Dublin, y a la camita.
Viernes día 2. Quedamos con las chicas y nos decidimos a ir a hacer trekking al Parque Nacional de Tierra del Fuego, situado a unos 12km de Ushuaia, lo preferimos a la navegación por el Canal de Beagle porque en ésta ves cosas que ya hemos visto como es una pingüinera y isla de lobos marinos. Cogemos (“tomamos”) un minibus que por 50$ pesos incluye ida y vuelta al Parque (es lo más barato, bueno lo más barato sería ir a dedo pero claro…). La entrada al Parque otros 50$ (para los argentinos sólo 10$, ahí va mi queja y mi crítica, esto se repite en otras situaciones y me parece totalmente injusto, pero bueno, que li farem, oi?).
Una vez en el parque avistamos y nos hacemos unas fotos con el Tren del Fin del mundo, recorrido que éste hace a lo largo de unos 7km por el parque (turista da). Hay bastantes caballos salvajes sueltos y en alguna ocasión incluso nos tenemos que apartar pues vienen cabalgando y mejor apartarse.
Hicimos trekking por algunos senderos muy bonitos, entre bosque y con bastante barro por la lluvia del día anterior, mucha más humedad que en El Chaltén. Llegamos a Bahía Ensenada donde hay unas vistas bonitas y está el post-office más austral del mundo.
Volvimos a la carretera de la Ruta 3 e “hicimos dedo” para llegar a la Bahía de Lapataia porque íbamos justos de tiempo y era la única forma de verlo y nos habían dicho en el hostel que la panorámica era espectacular (confirmado). Por lo que por primera vez en mi vida hice autostop y nos pararon y nos llevaron una pareja encantadora, jeje.
Bueno vimos el lago Roca, precioso, y finalmente la Bahía Lapataia, un lugar donde ves una bahía de hipo, las montañas nevadas de fondo, una isla, unos lobos marinos que pasaban por allí, en fin, have no words…
De vuelta, cenita en el hostel, muy buena onda con la gente del hostel, de lugares tan diversos como Israel, Brasil, Francia, Australia, etc. Y por la noche fiesta con los argentinos del bus y sus colegas y otra gente del hostel. La pasamos en grande y a las 5.30h a la camita que tenemos vuelo de regreso a Buenos Aires a las 11.30am.
Levantarse se hace duro, cargamos mochila, otro check-out (100$ dos noches por cabeza), taxi loco hacia el aeropuerto y vuelo de 3h a Capital Federal.
Ahora estamos en la terminal del Retiro esperando el ómnibus de las 22h para ir camino de Cordoba, inicio de nuestro periplo por el centro y noroeste del país. Esto continua, en el norte los precios por fin bajan y nos tomaremos en algun lugar bonito un par de días de relax porque esto es un no parar. Besos!!